La tecnología y la innovación son dos factores claves en el crecimiento de cualquier país, y nuestro territorio no se queda atrás. Por eso, el Tecnódromo de Expoagro “Mario Bragachini” se encuentra trabajando para demostrarlo del 7 al 10 de marzo en la mayor muestra a cielo abierto de la región.
Las voces de los expertos aseguran que en Argentina existe mucha innovación y que, a ojos del mundo, somos referentes. En ese sentido, el Ingeniero Agrónomo, Hernán Ferrari, integrante del Grupo de Mecanización Agrícola del INTA – Concepción del Uruguay, y miembro del equipo de producción del Tecnódromo, afirma que: “Argentina se encuentra realmente muy bien posicionada. A pesar de todos los problemas que podemos llegar a tener, en incorporación de tecnología, innovaciones y Agricultura de Precisión, estamos en el 3° lugar del mundo”.
Y resalta que nos encontramos debajo de Estados Unidos y Alemania, “pero no solo eso, sino que de los 194 países que componen nuestro planeta, estamos en el 13° lugar en relación a desarrollos de tecnología para la agricultura y para la ganadería”.
Los protagonistas de este logro, según Ferrari, son los productores y los contratistas de nuestro país, en especial éstos últimos, ya que incorporan tecnologías rápidamente: “Lanzan un nuevo desarrollo en Estados Unidos o en Alemania, y al 3° año ya lo incorporan masivamente en la Argentina. Y eso nos vuelve lo que somos actualmente: uno de los países más eficientes del mundo en producir alimentos”.
En la misma línea, el representante de AAPRESID y miembro del equipo de producción del Tecnódromo, Luis Negruchi, asegura que Argentina es uno de los países que más crea tecnología.
Por su parte, el Ingeniero Agrónomo e integrante del equipo de producción del Tecnódromo Edgar Ramírez, cuenta que actualmente se encuentra trabajando en un proyecto de cooperación bilateral entre Alemania y nuestro país y asegura que, en comparación, Argentina recopila muchísimos más datos del trabajo que se realiza en el campo.
Sin embargo, aunque el panorama se presenta más que positivo y prometedor, existe un aspecto en el que aún se tiene que trabajar fuertemente: la infraestructura para procesar estos datos. Los datos computados permiten generar información, tomar decisiones y, por ende, perfeccionar procesos, mejorar la producción y marcar trazabilidad de los productos.
“La base la tenemos, pero tenemos maquinaria que viene de fábrica con mucha tecnología que en el campo no sabemos usar, porque además no hay capacitación. Falta capacitación hacia los productores y técnicos”, agrega Ramírez.