Desde Federación Agraria Argentina propusieron que el gobierno elimine el IVA de una serie de productos de la canasta básica de alimentos (cortes vacunos, pollo, cerdo, lácteos, pan y productos molineros, aceites). “Esta sería una manera directa para que los argentinos sientan en su bolsillo la baja (o al menos una suba menor) de los alimentos, sin destruir toda la cadena de exportación, como se intentó semanas atrás”, señalaron los federados en un comunicado.
Y precisaron: “Esta medida podría financiarse con el diferencial que percibe el Estado como consecuencia de los altos precios internacionales de los granos, que es a la fecha aún más elevado que el que habían previsto en el presupuesto nacional de este año. Es decir que, sin generar cambios en el sistema de exportaciones, y sólo aprovechando la suba de estos productos en el mercado internacional, el Estado percibe más dinero por las retenciones. Esta diferencia, que es un ingreso extra no considerado, podría usarla para financiar la eliminación del IVA a los alimentos de los argentinos y beneficiar así a toda la ciudadanía”.
Al respecto, FAA señaló que realiza la propuesta luego del intento del gobierno de introducir modificaciones en el mercado granario. “Cuando se intervienen los mercados a través del cierre de exportaciones, cupos, y otras ideas, quienes más pierden son los productores primarios, en especial los de menor escala… Esto ya lo vivimos” y añadieron: “Sin destruir nuestra reputación en el mundo, y cuidando a productores y consumidores, vemos una enorme oportunidad que el gobierno debería aprovechar, ya que va recaudar varios miles de millones de dólares extra por la suba de la soja y el maíz en concepto de retenciones, que podrían volcarse para favorecer el mercado interno”.
Continuaron: “Cada vez que se modifican inesperadamente las condiciones de exportaciones en nuestro país, se altera la percepción que el mundo tiene de la Argentina y se beneficia a nuestros competidores. Esto es todo lo contrario a lo que necesita la economía. Debemos seguir exportando para lograr las divisas que requiere el país y producción en el interior”. Y agregaron: “Desde FAA siempre se entendió que la mejor manera de encontrar un entendimiento con el gobierno nacional para que se acuerden las políticas públicas que permitan a los pequeños y medianos productores de la Argentina ser aliados en desarrollar un país bajo un modelo productivo, inclusivo y sostenible, es transitando el camino del diálogo permanente. Así siempre se ha manifestado desde nuestra entidad. Y dado que al momento aún no existen los ámbitos para expresar esta y otras ideas, las hace públicas de este modo”.
“La matriz tributaria tiene que ser indefectiblemente revisada ya que la concentración y desaparición de productores nos alarma. Insistimos en que los impuestos tienen que ser progresivos. Y las medidas, consensuadas” dijeron los federados y precisaron: “Porque la idea que tuvieron días atrás de cerrar el cupo de las exportaciones de maíz se dictaminó, supuestamente, para lograr que no aumente excesivamente el precio de las diferentes carnes y la leche en el mostrador de los argentinos (en un momento en que el país que vive una terrible crisis económica con repunte inflacionario y niveles inaceptables de pobreza). Si nos hubiesen consultado, habríamos dicho que compartíamos la idea de abastecer el mercado interno en cantidad, calidad y precio, advertimos que el gobierno nacional se equivocaba una en el camino: cerrar las exportaciones solo traerá menos producción, mayores precios a futuro y menos empleo en toda la Argentina”, indicaron los federados.
“Esa medida fue desacertada, porque había stock de sobra de maíz para abastecer el mercado interno, superando a la demanda en una proporción cercana al 10 a 1. Esta convicción nos obligó a reaccionar frente a la medida inconsulta por parte del gobierno nacional. Estamos convencidos (por lo que sabemos y a la vista de todas las experiencias anteriores que hubo en el país) que la Argentina debe posicionarse en el mundo en un mejor lugar como productor de alimentos”, aseveraron.
Y concluyeron: “Entendemos que la agenda internacional actual que nos rodea, nos obliga a ser actores responsables a la hora de aprovechar los puntos de acuerdo que podamos llegar alcanzar para ir hacia la generación de empleo y aprovechar al máximo los precios internacionales que están teniendo hoy los commodities, que dan el aire fiscal necesario para avanzar. Por todo esto, deberíamos poder trabajar junto a las autoridades para transitar el camino correcto, que permita que los productores puedan trabajar y desarrollarse con reglas claras, con consensos, pero sobre todo por el bien de todos y no de unos pocos. Hay un largo camino por recorrer para reconstruir tantas producciones de pequeños y medianos productores que están quebrada”.